Nunca subestimes el poder de la negación
American Beauty
Con el perdón de Gabo por el título y las revistas del corazón y alguno que otro colega, que ya le han dado duro al tema, me permito desarrollar mi tesis sobre el particular, aprovechando que tengo experiencia personal o por decirlo de otra manera he sido victima del fenómeno. Voy a referirme a dos tipos de experiencia amorosa que se viven en los tiempos de facebook, una, la relación tradicional donde dos personas se conocen y empiezan a frecuentarse, se gustan, se encarretan y además del contacto personal, se les ofrecen herramientas de proximidad mediática como msn, skype y facebook, y la de la de dos personas que se conocen a través de cualquier red social y se gustan y se encarretan y etc. De la primera ya dan cuenta un montón de artículos de prensa, con estadísticas y tablas sobre la cantidad de personas que se han separado, se han dado cuenta que les mienten o que les son infieles a través de facebook u otros; de eso, hemos sido víctimas todos a cierta escala, o díganme a quien no se le ha dañado una bonita mañana de sol por una puta foto de facebook, publicada por alguien externo, probablemente sin ninguna intención en particular, pero que inmediatamente usted asocia malamente y autor y foto se enredan en la misma maraña y los odia por un buen rato a la par y además se convence que facebook es un engendro del demonio; también puede pasar lo mismo por un comentario pero la mente que es esquiva y perversa (como Mark Zuckerberg o más) intenta salirse por otros recovecos, maquinando excusas imposibles, en cambio la foto, como lo sabe la publicidad una imagen vale más que mil la palabras y bang, a foto puesta día arruinado. Es necesario un acopio de autoestima, confianza y no se que más cosas, que les permite a ciertos individuos privilegiados ir por el universo de facebook viendo fotos y comentarios con su espíritu inalterable, y solo ven niños hermosos y robustos, bodas de familiares y amigos en situaciones divertidas, sin que haya un exnovio, o un pronovio, una buscona, un comentario subido de tono o una canción colgada por él o para él, sin el manual de instrucciones. Y es que porque la gente no tendrá la gentileza de aclarar a que viene ese comentario, esa canción o esa puta foto-arruinadíasoleado, que les cuesta carajo? Pero si usted es un individuo como yo y cualquier otro, de pata al piso y proclive a rayarse por algo así; y a pesar de los entuertos de los otros y la conspiración de facebook, la relación logra trascender les recomiendo que hagan como mi amiga Lina y su chico-pajarito, que comparten hasta hijo pero no facebook, es lo más sano, creo.
Ahhh y de los otros amores de los enteramente mediáticos, de los que muy pocos han vivido de verdad, pero que todos opinan que son ridículos, miedosos e imposibles; yo que lo viví más que nadie y mejor que nadie y más idiotamente que nadie, sólo puedo decir una cosa, el amor por facebook es como el carnaval de Barranquilla, sólo el que lo vive es el que lo goza..... o lo padece, después.
Ya les contaré....
Ya les contaré....
